jueves, 23 de octubre de 2014

Existir...
Vivir... 
¿Son lo mismo?

Existir es el hecho de estar. Vivir, en cambio, es movimiento.

Hoy en la mañana desperté sabiendo que tenía un mundo de trabajo esperando en la oficina, y, ¿saben? Me sentí bien con ello; me gusta ir a mi trabajo y entretenerme haciendo informes, yendo a supervisar obras, sacando cuentas, haciendo pruebas... Levantarme temprano en la mañana sabiendo que en un punto de la ciudad me espera una silla, un escritorio y una computadora para servirme en el día, o que tendré que salir a carretera rumbo a una planta de asfaltos.

Llevo desde hace unos días pensando acerca de qué es lo que le da valor al hecho de vivir, lo que me parece más satisfactorio es el hecho de crear; hacer algo. Me dí cuenta de esto mientras lijaba/pintaba/barnizaba uno de los muebles de mi cuarto; terminar y ver el resultado de horas de trabajo es gratificante. Pueden ser pequeñas cosas quizás; como mis pinturas, o mi afán de cocinar las que me hacen sentir viva, útil. Claro que por otro lado también tenemos en un lugar bastante especial a las experiencias, experimentar es movimiento, vida. Va desde cosas mundanas como el sabor de helado que uno escoge a la práctica de algún deporte extremo.  



Muchas personas existen,
pero ¿Cuántas viven?

martes, 14 de octubre de 2014

El fotógrafo


El otro día platicando con un amigo fotógrafo entre la plática -de las tortugas saliendo de sus cáscaras en alguna paradisíaca playa mexicana- me dijo sin tener un hilo que siguiera con esa conversación, que le había inspirado (quizás sin querer) a intentar ser más espontáneo al momento de sacar sus fotografías.

Entré en un estado de escepticismo porque cuando me aclaró que acción mía le inspiró estaba totalmente incrédula a lo que me decía; principalmente porque sacar fotos es su trabajo y algo que le apasiona; inspirar a alguien en su actividad principal es, vaya, inspirador.

El ha sido también para mí una fuente de inspiración. Su estilo de vida tan alejado de los estándares sociales generalmente aceptados me encanta; es un muchacho que forzadamente terminó la prepa, que trabaja de algo que le apasiona y que ha hecho ya un oficio, un muchacho que lucha por cumplir con sus objetivos y no tiene miedo de romper con lo usual.

La libertad con la que se maneja me parece increíble, y nuestra amistad también; es como el choque de dos mundos completamente diferentes; la regla y la excepción encontrando convergencia, alimentándose una de la otra.

Esa conversación nuestra fue sinceramente un cumplido para mi, y una invitación a seguir haciendo lo que sea que estaba haciendo, y sobretodo encontrar inspiración todos los días en las pequeñas cosas.




Es bueno ver el mundo desde otra perspectiva.