Muchos días no hubo siquiera música,
el silencio lo invadía todo;
y quién diría que al final
éste fuera más cruel que aquella.
Muchos días se perdieron de soles,
las sonrisas estaban todas fuera de lugar,
y las lágrimas parecían adecuadas
pero nunca suficientes.
Muchos días esperé por lo imposible;
un regreso a nunca jamás,
un poco de aquella magia prometida,
o tan sólo desaparecer.
Muchos días las razones estaban equivocadas
y la verdad se escondía entre palabras;
oraciones que fueron escritas
y las más despiadadas pronunciadas.
Muchos días pasaron sin llover;
sin la promesa de encontrar entre el agua y la luz
el arco de colores que lleva a la fortuna,
o mínimo respirar de esa tierra infértil su humedad.
Muchos días sin que pudiese comprender
que a veces uno tiene que perder,
que dejé escapar todos aquellos soles;
que dejé escapar toda aquella vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario